viernes, 28 de agosto de 2015

Aunque China vaya mal… ¡España va bien!




A pesar de la Crisis en China y de una teórica gran bajada del precio del petróleo…que todavía no llega realmente a las gasolineras…España va bien. Casualmente estamos en un año electoral…
El PIB creció un 3,1% en el segundo trimestre. Y nos explican que se debe sobre todo a la mejora de la inversión y al consumo de los hogares, que aumenta un 3,5%. Y, evidentemente, este consumo es la consecuencia de que hay más gente trabajando, porque el empleo sube un 2,9%.
Pero esa gran recuperación española sigue cojeando por el lado de los salarios. Siguen estancados a pesar de la mejora de la economía y apenas suben un 0,2%.
¿Se lo creen?
Porque en España seguimos teniendo un paro oficial del 22,5%. Y los parados siguen sin encontrar trabajo remunerado por mucho que nos quieran vender el milagro de los panes y los peces.
Con las cifras económicas los interés políticos consiguen convencer a casi todo el mundo, y todo depende de la interpretación de un número. Los datos del paro son la gran evidencia, porque son sólo números estadísticos…y con las cifras se manipula mejor que con las palabras.
Ya lo dijo Galbraith: “Para manipular eficazmente a la gente, es necesario hacer creer a todos que nadie les manipula”.
El ministro de Hacienda y Administraciones Públicas, Cristóbal Montoro, aseguraba en abril que España podrá crear 20 millones de empleos con una nueva legislatura del PP si se fortalece la recuperación económica y hay estabilidad política.
A pesar de la crisis bursátil, tras las dudas sobre el crecimiento en China y su frenazo inversor, el partido en el Gobierno prepara ya las Elecciones. Y para ello España tiene que ir bien, cumpliendo exactamente lo anunciado por Montoro.
La recuperación económica (mejor decir Macroeconómica) es, para ellos, muy clara.
Los grandes agregados económicos van de cine, aunque el pueblo no lo perciba…
Luis de Guindos dice que el desplome de la Bolsa se debe a factores "exógenos". Como gran experto detalla que…"En agosto la liquidez es más reducida y los mercados sobre reaccionan".
Todo normal. Ya lo dijo Groucho Marx: “Claro que lo entiendo. Incluso un niño de cuatro años podría entenderlo. ¡Que me traigan un niño de cuatro años!”

Mark de Zabaleta



sábado, 22 de agosto de 2015

29X29 El verdadero Keynesianismo…





Parece fácil recordar la fecha (29 de Octubre de 1929) del desplome bursátil de Wall Street, inicio de la , hasta ahora, mayor crisis financiera y económica a nivel mundial. Vamos a comentar el escenario en que se produjo: Alto consumo, Ventas a plazos, Confianza en la capacidad industrial/empresarial de los EEUU…y Euforia bursátil.
La Bolsa no dejaba de subir y las familias se endeudaban para seguir comprando acciones. Una acción que cotizaba a 2 dólares en 1921, ¡se negociaba a 119 dólares en 1929!  Gran número de Bancos y una política de dinero barato, servían para “echar leña” al fuego inversor.
Un buen día, en Octubre de 1929, esta burbuja de constante crecimiento, reventó. El recién elegido Presidente, el Republicano  Herbert Clark Hoover, estimó que la economía se estabilizaría por sí misma. Y no hicieron prácticamente nada. La crisis se extendió por todo el mundo. Solamente Rusia y Japón se mantuvieron al margen.
Hubo que esperar a un nuevo Presidente Demócrata, Franklin D. Roosevelt en 1933,  para iniciar el “New Deal” con un importante Plan de Inversiones combinando la devaluación del dólar con las ideas keynesianas…
Roosevelt,  valiéndose  del New Deal,  movilizó   dinero  público  para  generar  actividad económica y  poder adquisitivo tal como propuso John Maynard Keynes, al que  siguió  en   gran  parte  de  sus  postulados.  Los  principios  económicos  expuestos  por  Adam Smith  ya  no eran la referencia incontestable,  pues  no  habían  sido  capaces  de  solucionar la  Gran Crisis de 1929. 
Keynes  apostó  por  la  estimulación  de  la  Demanda  y  el  Incremento  del  Poder Adquisitivo, pilar básico del capitalismo. Proponía que  el Estado  tuviera  un papel protagonista: ya  no  era  aquel  Estado  que,  siguiendo  los  postulados  propios  del  liberalismo  económico,  no debía  de  intervenir en  la economía,  dejando que  fueran las  libres  fuerzas  del  mercado  las  que resolvieran la crisis, sino que, muy al contrario, era necesario el empleo  de los  fondos  públicos  hasta el momento en que los recursos privados se recuperaran.
Los  historiadores  están de acuerdo en afirmar que el economista británico influyó en la política  del New  Deal de  Roosevelt… El  presidente  estaba  proponiendo  un  nuevo  Estado  con funciones  extraordinarias  que  hasta  ahora  sólo  se  habían  acometido  en  estado  de  guerra. 
Un Estado  que  tendría  que  realizar inversiones  en Obras  Públicas, debía  proporcionar  ayudas  a  las empresas  a  pesar  de  se  sufriría  un  Aumento inmediato del  Déficit  Público. Pero, siguiendo  sus razonamientos,  se conseguiría  de  este  modo  una Creación de Puestos  de Trabajo, reducción del paro, aumento de la renta familiar y, finalmente,  un  crecimiento del consumo que provocaría un aumento  de  producción de bienes  y servicios, aumento  de  los  ingresos  del  estado y reducción del déficit público.
Sin embargo, entre los numerosos escritosde Keynes existe un interesante artículo, poco conocido, que puede servir de referencia para la actual política económica y que se titulaba: La Autosuficiencia Nacional, escrito en 1933 y publicado en la Yale Review, en plena crisis. Allí afirmaba: “Como la mayoría de los ingleses, he sido educado en el respeto del libre cambio”. Pero “mis esperanzas, mis preocupaciones y mis temores han cambiado”, en forma similar a lo que le ocurría a la mayor parte de su generación en el mundo entero. Ahora no estaba “persuadido de que los beneficios económicos de la división internacional del trabajo sean comparables a lo que fueron”, aunque un nivel elevado de especialización internacional continuaba siendo necesario en un mundo racional.
Sin embargo, para una gama de más en más extendida de productos industriales, e incluso agrícolas, Keynes no creía que las pérdidas económicas debidas a la autosuficiencia “sean superiores a las ventajas” que pueden obtenerse en el marco de una misma organización económica y financiera nacional. Y proclamaba: “Produzcamos en nuestro país cada vez que sea razonable y prácticamente posible, y sobre todo, hagamos lo necesario para que las finanzas sean nacionales”. Parece un tema a estudiar…
Keynes hablaba de estimular la Demanda (del pueblo) incrementando su poder adquisitivo, hablaba de producir en cada país…no hablaba de rescates (interesados) entre Estados de una Comunidad Virtual que dan subvenciones a los países pobres para que sigan comprando a los ricos…
Aunque todo el mundo quiera llamarse keynesiano…

Mark de Zabaleta

viernes, 21 de agosto de 2015

EUROPA empieza a sufrir su gran ERROR…





En la Eurozona ya comienzan a temblar los cimientos. Obligados a aprobar un tercer rescate a Grecia, que ya va preparando una vía de escape ruso por si hay problemas, y agobiados por la situación en Francia, Italia y España (sin olvidar a Portugal e Irlanda…)
Para el profesor de Cambridge Ha Joon Chang, un keynesiano, el problema es la moneda única. Esta tiene sentido cuando la introduces en una región que es más o menos homogénea en términos de estructura económica y productividad. Pero el Euro se introdujo en una zona de grandes desequilibrios. Estados Unidos es un país del tamaño de un continente. Hay diferencias de renta importantes, pero hay una unión física, hay transferencias fiscales y el mercado laboral está totalmente integrado, al no haber barreras de idioma.
En Europa, imponer una moneda única fue un gran error.
Aunque Grecia parece ser el detonante, la verdadera bomba que haga estallar el Euro será Francia…donde la depresión ha llegado a una economía “fuerte” de la Euro-UE: la situación ha llegado hasta tal punto que en vez de sancionar a Francia por su déficit excesivo…han aprobado darle una nueva prórroga de dos años, hasta 2017, para volver a situarlo por debajo del límite del 3% del PIB que fija el “famoso” Pacto de Estabilidad y Crecimiento.
Evidentemente el Consejo de Asuntos Económicos y Financieros (Ecofin) exige más recortes a París (mejor no hablar de Atenas…) ¿aguantará la sociedad francesa más pobreza por la austeridad que impone la zona Euro? ¿Será la Revolución francesa? De momento ya empiezan a votar al FN…Y Grecia hará su revolución…
Para Marine Le Pen los cuatro puntos críticos de la actual crisis y que la UE no ha resuelto tras estos largos años, son la moneda, el control fronterizo, la primacía de la ley francesa, y también lo que llama el patriotismo económico: la facultad de aplicar un proteccionismo inteligente que salvaguarde el modelo social. “No me puedo imaginar una política económica sin un control total sobre nuestro propio dinero”, dice Le Pen. “Recuperar la soberanía monetaria puede ser clave para Francia, España e Italia, dado que el euro ha creado una absurda división norte-sur, donde todas las políticas se toman en Bruselas”. De Grecia ya ni comentar…
La situación que afronta Italia para tratar de solucionar la inmigración masiva ha puesto en evidencia que no existe realmente “una” UE,…y cada país tiene que “buscarse las habichuelas”. Y con el Euro pasa exactamente igual. Lo importante es que Alemania tenga un amplio mercado europeo para vender sin riesgo de cambio…y lo del paro en España y Grecia ya lo solucionará cada cual…¡como la inmigración!
El fin del Euro llegará. Tiempo al tiempo… de momento, tras poner Grecia en venta y no haber respetado su programa electoral... ahora Tsipras dimite.
Como dijo Groucho Marx: Claro que lo entiendo. Incluso un niño de cuatro años podría entenderlo. ¡Que me traigan un niño de cuatro años!



Mark de Zabaleta